miércoles, 1 de octubre de 2008

Mañana en el Abasto


Joya del último álbum de Sumo, poesía suburbana pura a cargo de Luca Prodan, italiano educado en Escocia, que vino a Argentina para curarse de la adicción a la heroína que contrajo en Inglaterra.
Toda esa mezcla hizo que el tipo conociera los movimientos sociales y musicales de los '70, como el glam, el reggae, el punk y la incipiente new wave, que en Sumo se combinaron de manera inigualable, por lo menos en este rincón de América.
"Mañana en el Abasto" escasi un recitado, en el que Luca describe al barrio como si fuese porteño de nacimiento. Casi que se puede ver al viejo sentado ahí, o a José Luis y su novia, o a Sergio trabajando en la estación de subte B.
El final es premonitorio, de la mano del estado físico de Luca al momento de escribir y cantar la canción: "Y yo me alejo más del suelo/ y yo me alejo más del cielo, también". Imperdible.
Se escucha en: "After chabón" (1987)y compilados como "Obras cumbres".

lunes, 11 de agosto de 2008

Guarden los teléfonos

"Si apagan los celulares, quizás puedan disfrutar del show", dijo Björk en pleno concierto, el año pasado en nuestro Gran Rex. Cansada de esos aparatitos que no dejaban de retratarla o filmarla, la islandesa paró la canción que estaba interpretando para rogar que hicieran valer el dinero de la entrada de otro modo.
Desde hace unos 4 o 5 años, cada vez que fui a un recital -de esos en los que la gente está sentada, obvio, como Jethro Tull por ejemplo- no pude evitar compadecerme de los pobres tipos que lo único que hacen es sostener el telefonito en alto para retratar a quien está en el escenario, cuando (me parece) lo verían mejor con sus propios ojos, y no a través de una pantalla. Para eso, es mejor esperar el material de algún otro bobo que lo grabe y bajarlo de Youtube.
¿Qué lleva a la gente a dejar de lado la emoción de tener enfrente a ese que sólo ves en las revistas o la tele, y pasarse la noche filmándolo o sacándole fotos? ¿Por qué ese afán por dejarlo todo registrado?
Si hay algo que envidio en cualquier acontecimiento es el famoso "yo estuve ahí...": el que vio a Sumo, el que fue al show de McCartney en River, el que vio a Almendra en un teatrito de mala muerte, el que estuvo en Obras en 1987 para el primer show argentino de Ramones, inclusive el que fue a algún partidazo de fútbol... Todos sucesos con muy pocos registros audiovisuales, lo que los hace aún más especiales. En un futuro cercano, ese componente se perderá por completo, debido a que TODO podrá ser visto u oído.
Tal vez la frase se modifique: "Yo no estuve ahí, pero me lo pasó un amigo por mail". Si es mejor o peor, es opinable, yo prefiero la envidia que me produce saber que alguien vio algo que yo me perdí, y la pequeña gran satisfacción de exclamar "yo estuve ahí...".

viernes, 25 de julio de 2008

It ain´t me babe


Hermosa (adjetivo grasa si los hay) canción de Bob Dylan, a la que incluiría en cualquier compilado del señor Zimmermann. A través de la letra, Dylan intenta convencer a una muchachita que él no es la persona que está buscando. O sea: una canción de amor no correspondido pero más original, desde el lado del que rechaza, y no del rechazado.
"Todo dentro mío es de piedra /nada se mueve/ y de todas maneras no estoy solo", clarito como el agua, mientras reconoce ser "un amante en tu vida y nada más". En fin, una canción muy recomendable. Es difícil elegir sólo un tema suyo, pero éste sin dudas vale la pena escuchar.
Pd: el cover de Johnny Cash en ritmo country es igual de buena.
Se escucha: en varios compilados, editada originalmente en "Another side of Bob Dylan" (1964).

miércoles, 25 de junio de 2008

Cine y rock


Acá van un puñadito de películas en las que la música es el centro. Si todavía no vieron ninguna, ¿en qué perdieron el tiempo?

-Almost famous (Casi famosos): cuenta las andanzas adolescentes de un futuro periodista de Rolling Stone, cuando sale de gira con una banda de rock venida a menos. Rescató a "Tiny Dancer",de Elton John, y la volvió rockera.

-High fidelity (Alta fidelidad): impecable film en el que aparecen retratadas todas las mañas y los gustos de los amantes de la música, como estar permanentemente armando rankings -como éste- o armar un compilado con la precisión de un cirujano.

-End of the century (Fin de siglo): documental sobre la vida y obra de The Ramones. Espectacular en las entrevistas, bien íntimas. Demuestra que los tipos estuvieron casi 15 años sin hablarse entre sí, como aquellos planteles de fútbol que se pelean afuera pero en la cancha dejan todo. Pinta a Johnny como un déspota.

-The filth and the fury (La mugre y la furia): otro documental, esta vez sobre los Sex Pistols. Muestra con precisión -e imágenes inéditas- cómo era el ambiente en el que nació el punk inglés. Muy recomendable.

-Woodstock: el momento cumbre del rock de fines de los '60 fue el festival que aquí se documenta. Los mejores -o casi todos ellos- en su mejor momento. Un clásico de las salas de cine de trasnoche en los '70.

-Rock and Roll Circus: súper encuentro de gigantes con una estética circense, de la mano de los Rolling Stones. Desde Jethro Tull a John Lennon y The Who. Sencillamente imperdible.

jueves, 12 de junio de 2008

Lo único que faltaba: el Bossa N' Ramones


Primero fueron por los Stones, luego por Marley, la siguieron con Guns & Roses, y una lista que cada vez se hace más larga... Pero ahora se metieron con ellos, y la cosa pasó de castaño oscuro. Llegó el Bossa N' Ramones, nueva bazofia de la industria pensada para aquellos que jamás en sus vidas se habrían comprado un disco de los monchos ni menos aún hubieses ido a un recital.
Reconozco que el Bossa N' Stones me gustó, me pareció original, pero lo que siguió después fue más de lo mismo: una mina cantando bajito y haciéndose la sensual, como si eso fuera bossa nova (¿¿??). Pero ahora se metieron con ellos. Esto es personal. Llegó el Bossa N' Ramones. Puaj.

lunes, 28 de abril de 2008

Wish you were here


Una inmortal introducción de guitarra abre esta inmortalísima canción de Pink Floyd, incluida en el álbum del mismo nombre. Casi todo el disco es un gran homenaje a Syd Barrett, fundador de la banda (sobre todo el primer tema, “Brilla tú, diamante loco”), quien para ese entonces había abandonado al grupo unos cinco o seis años atrás, mentalmente perturbado por las drogas, en especial el LSD.
Dicen que Barrett apareció mientras se estaba grabando el disco, irreconocible por su calvicie y sus kilos de más, muy distinto al flacucho desgarbado y de mirada triste de los años fundacionales de Pink Floyd, bautizado así por los dos ídolos de su creador: los bluseros Pink Anderson y Floyd Council.
La canción fue un clásico de los shows de Floyd a partir de ese momento, inclusive la tocaron en la vuelta de la banda en 2005, en ocasión del Live 8.
Pd: recluido durante casi treinta años en el sótano de su casa, Syd Barrett murió en julio de 2006, acosado por la diabetes. Ya era una leyenda hacía rato.

sábado, 5 de abril de 2008

Whatever


Una de mis canciones favoritas de Oasis, grupo del que nunca fui un fanático pero que me gusta, a pesar de que sólo me haya comprado un disco de ellos (el famoso "(What’s The Story) Morning Glory?").
La particularidad de Whatever es que no está incluida en ningún disco oficial, ya que fue editada en forma de single. Lo mejor es la melodía, sin dudas, una de las más pegadizas del grupo británico más bardero de los '90. Dicen por ahí que David Bowie los habría intentado enjuiciar por plagio, vaya uno a saber por qué canción.
Lo curioso es que, cada vez que se toca en vivo, le inventan un nuevo final, con estribillos de clásicos del rock, como "Octopus's Garden" de los Beatles y "All the young dudes", de Bowie (¿una burla a su intento de juicio?)
Pd: dedicado a Cata, gran fan de Oasis. Welcome back.

jueves, 6 de marzo de 2008

Cuchillos


A mi entender, la última gran-gran canción de Charly García, correspondiente a su disco Say No More, una verdadera bisagra en su carrera, ya que a partir de ahí giró hacia una postura mucho más vanguardista, a veces directamente inexplicable y muy cercana al absurdo.
La letra demuestra una vez más que Charly es un verdero poeta, y los versos de Cuchillos están a la altura de sus mejores canciones. Sin dudas, muy recomendable.
Pd: no me gusta nada la versión de Mercedes Sosa, es más, podría decirse que no soporto a ninguno de los dos: a ella y al cover.
Se escucha en: Say No More (1996)

miércoles, 20 de febrero de 2008

Where the streets have no name


A pedido del fan de U2, acá está la canción inicial de The Joshua Tree, álbum que catapultó definitivamente a la banda como una de las más grandes del planeta, editado hace ya 20 años e integrado por otros temazos como With or without you, o bien I´m still haven´t found what I´m looking for, los que hoy ya son clásicos del rock de todos los tiempos.
En un compilado hecho hace unos años (llamado “Greates Irish Bands”), con temas seleccionados por Bono, el primer tema del disco es justamente Where the streets have no name, por lo que -se supone- es para él la mejor o más representativa canción del grupo.
Curiosidad: dicen que el productor Brian Eno, debido a la complejidad de la canción, propuso durante las sesiones de grabación que esta se eliminara del álbum.
Chisme sin sentido: un amigo fue chofer de Adam Clayton durante la última estadía en el país. Es decir, un par de días manejando una limusina, pasando el tiempo en el Faena Hotel.

jueves, 14 de febrero de 2008

Diez de acá

Lo que sigue no es un ranking ni nada por el estilo: son sólo diez temazos del rock y el pop argentino, en un orden aleatorio. Por eso, que una canción esté mencionada antes que otra es una mera casualidad producto de lo que fui recordando (y más de una, en su momento, será seguramente homenajeada en este espacio). Terminando esta fenomenal apertura de paraguas, acá van diez recomendaciones para conocer o volver a escuchar.
Tema de Pototo (Almendra)
Las increíbles aventuras del Señor Tijeras (Sui Géneris)
Susy Cadillac (Riff)
Aeroblues (Aeroblues)
Mañana en el Abasto (Sumo)
Jijiji (Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota)
Fuera de sektor (Los Violadores)
Demasiada presión (Los Fabulosos Cadillacs)
Sin color (Fun People)
Funky (Charly García)

jueves, 31 de enero de 2008

Judy is a punk


La primera vez que la palabra "punk" aparece en una canción, y como no podía ser de otra manera, es propiedad de los queridos Ramones. Además, cuenta la leyenda que es la primera canción del primer recital de los Monchos, allá por 1974 en el legendario CBGB neoyorquino, cerrado hace un par de años.
Prueba irrefutable de que el punk rock nació en EEUU y no en Inglaterra, y un temazo de esos que provoca que uno mueva el pie siguiendo el compás. Para otros, más aburridos, es un ruido infernal.
Pd: nunca entendí por qué le pusieron "Judy is a punk", si la letra dice "Jackie is a punk, Judy is a runt". Entonces, la punk es Jackie... en fin...
Suena en: "Ramones", el primer disco de la banda, y en cualquier disco en vivo.

viernes, 25 de enero de 2008

Misty mountain hop


Temazo entre temazos, este es un de mis preferidos de Led Zeppelin. Integra un disco en el que están, por ejemplo, "Stairway to heaven", "Rock and Roll" y "Black dog", un conjunto que para la mayoría de las bandas sería un Grandes Éxitos. Su letra habla de la nueva movida ("Mucha gente sentada en la hierba con flores en el pelo"), y aborda a la represión con ironía ("Se acercó un policía y nos preguntó si, por favor, nos importaría ponernos en fila"). Menos mal que los muchachos de Zeppelin nunca hicieron caso, y se quedaron en lugar de irse a las montañas brumosas.
Para los que no les suene el título, la canción fue durante el último año la cortina de "Duro de domar". Ah: 4 Non Blondes hizo un cover espectacular.
Está en: Led Zeppelin IV, editado en 1971 (disco indispensable), en el corrió la versión que los dibujos del diseño interno serían referencias satánicas.

sábado, 19 de enero de 2008

Strawberry Fields Forever


Una de las mejores canciones de The Beatles, sin dudas. Fue compuesta íntegramente por John Lennon, entre 1966 y 1967 –en España, mientras filmaba la película “How I won the war”-, y editada en febrero de ese año junto a Penny Lane, conformando quizás el mejor single de la historia.
“Strawberry Field” ("Campo de frutillas")era el nombre de un predio que el Ejército de Salvación (una especie de Cáritas) tenía cerca de la casa de John, donde él iba a jugar cuando era chico. En la letra, onírica y sombría, Lennon habla sobre la confusión que sentía en ese momento, siendo una de las personas más conocidas del mundo con apenas 26 años, y de la presión que eso acarrea.
“Es difícil llegar a ser alguien”, asegura mientras expresa: “Pienso que nadie está en mi árbol, debo estar muy arriba o muy abajo”, refiriéndose a la incomprensión que sentía, por buenas o malas razones.
El principio tiene los acordes de un melotrón –teclado nunca antes usado en el rock- y final es bien psicodélico, con la batería de Ringo emulando a una locomotora.
Además, durante los últimos segundos se oye a Lennon decir “Cranberry Sauce”, aunque cuando se dijo que Paul McCartney estaba muerto algunos pensaron que decía “I buried Paul” (“Yo enterré a Paul”).
El espacio dedicado a John en Central Park se llama, precisamente, “Strawberry Fields”.

Puede escucharse: en el álbum “Magical Mistery Tour” (1967). Además, los Cadillacs hicieron una versión muy digna, con la compañía de Debbie Harry.

viernes, 18 de enero de 2008

De qué se trata la cosa...

Con esta humilde introducción se inaugura este nuevo espacio (grancancion.blogspot.com), destinado no sólo a recordar, sino también a desmenuzar -y tratar de aportar datos curiosos, por ejemplo- sobre aquellas canciones del rock y el pop que hicieron historia en los últimos 50 años.
No es un ranking ni nada de eso, sólo un homenaje a esos temazos que forman parte de la banda de sonido del mundo (por lo menos el mío). Ah: como es habitual, la objetividad quedará de lado.